Cuando tu novio no cumple sus promesas contigo: una confesión personal
Vale, pues empiezo con algo que me pasó hace no mucho. Mi pareja me dijo que iríamos juntos a un concierto, uno que llevaba esperando años. Y ahí estaba yo, todo ilusionado, esperando el día, y ¿qué pasó? Nada. Ni concierto ni explicación, solo silencio. Y claro, ahí es cuando te das cuenta de que el tema de qué hacer si tu novio no cumple sus promesas contigo no es solo un meme o un mal chiste, sino una cuestión real, que duele y confunde.
Es que es así, las promesas en una relación son como esos pequeños pilares que sostienen la confianza, aunque a veces… bueno, a veces se caen y el edificio tiemble un poco.
¿Por qué no cumple sus promesas? Un misterio con mil caras
Voy a ser sincero, no hay una respuesta única. En mi experiencia y en la de amigos, puede ser desde una simple distracción hasta un problema más profundo de compromiso. O sea, a veces no es que te quiera fallar, sino que simplemente se le pasa, o no es tan importante para él como para ti.
Y ojo, que no estoy diciendo que sea excusa, pero entender el porqué puede ayudarte a decidir qué hacer. Porque no es lo mismo un “Me olvidé” que un “No me importa”.
Primero: no te lo tomes todo personal, aunque duela
Es lo primero que te diría, porque cuando alguien no cumple lo que promete, la reacción natural es pensar “es que no le importo”, “me está engañando”, “no valgo lo suficiente”… pero bueno, eso no siempre es verdad. A veces es un lío suyo, una incapacidad para gestionar su tiempo o sus prioridades, que puede que no tengan nada que ver contigo.
Claro, sé que suena a consejo de libro de autoayuda barato, pero es una base para no caer en un círculo vicioso de reproches que no llevan a nada.
La comunicación, esa gran olvidada
Esto es básico, aunque a veces parece que hablamos idiomas diferentes. Tienes que hablar, pero de verdad, sin gritos ni sarcasmos. Explica cómo te sientes cuando no cumple sus promesas. Y, ojo, no para que se sienta culpable sino para que entienda el impacto que tiene en ti.
Pero, ay, la comunicación es un arma de doble filo. A veces quieres abrirte y terminas en una discusión que no lleva a nada. ¿Os ha pasado? Pues eso.
¿Vale la pena seguir apostando? Evaluar sin dramas
Esto es complicado, porque el corazón manda y a veces quieres creer que cambiará. Pero, a ver, si la falta de compromiso es un patrón, si las promesas se rompen una y otra vez, quizás sea momento de pensar en poner límites.
No digo que tengas que mandar todo a la mierda a la primera, pero sí que reflexiones honestamente: ¿Qué estás dispuesta a aceptar? ¿Qué te mereces? Y lo más importante, si él está dispuesto a cambiar.
Las señales que no deberías ignorar
- Promesas rotas sin explicación.
- Falta de interés en mejorar o en escucharte.
- Que minimice tus sentimientos o te haga sentir exagerada.
- Repetición constante del mismo patrón.
Si ves que todo esto pasa, pues es que no es un accidente, es algo recurrente y ahí tienes la decisión más dura: seguir o no.
¿Y qué hacer en el día a día mientras tanto?
Bueno, aquí la cosa se pone más práctica. Yo intenté varias cosas y algunas funcionaron, otras no tanto. Por ejemplo:
- Crea tus propias expectativas, no las que él incumpla. O sea, no vivas esperando que haga X si siempre se olvida.
- Hazle saber que sus promesas importan para ti, pero sin presionarle hasta el punto de que se cierre.
- Busca apoyo en tus amigos o en personas que te entiendan, que te ayuden a poner las cosas en perspectiva.
- No te olvides de ti misma: sigue con tus proyectos, tus hobbies, tu vida. No te conviertas en una sombra esperando que él cambie.
Ah, espera, creo que me estoy liando un poco con esto. Tenia algo apuntado pero no lo encuentro, da igual. Lo que queria decir es que a veces ni haciendo todo bien sale. No sé si me explico pero bueno, ya me entiendes. Que no es cuestión de seguir reglas mágicas o listas perfectas, sino de sentir cuando algo no va y actuar en consecuencia, o algo así.
¿Y si decides hablar con él? Consejos para esa charla incómoda
Vale, la comunicación, sí, pero ¿cómo hacerlo sin que parezca un interrogatorio o un drama? Pues, mira, algo que me funcionó fue usar el “yo siento” en lugar de “tú haces”. Es decir, en vez de “tú nunca cumples”, “me siento decepcionada cuando las cosas no pasan”.
También, intenta buscar un momento tranquilo, sin prisas, para que la conversación fluya y no se convierta en un enfrentamiento. Pero claro, cada relación es un mundo y no siempre es fácil.
Cuando la promesa rota no es grave… o sí
Ojo, no todas las promesas tienen el mismo peso. Prometer llamar y olvidarlo puede ser menos grave que prometer algo que afecta a los planes grandes, como mudarse o comprometerse. Eso hay que tenerlo claro para no montar un drama por cualquier cosa.
Qué hacer si nada cambia: la decisión final
Bueno, llegados a este punto, si llevas tiempo intentando comunicar, poniendo límites, y nada funciona, pues quizás tengas que plantearte que no está tan interesado o que no está preparado para lo que tú quieres.
Y no pasa nada. No es fracaso. Es aprendizaje. A veces amar es soltar.
En fin, que esto de qué hacer si tu novio no cumple sus promesas contigo es un lío, pero es más común de lo que parece. Lo importante es cuidarte, poner tus límites y no perder de vista lo que mereces. Y, bueno, por si alguien se lo pregunta, no, no hay varitas mágicas. Solo decisiones difíciles y mucho, mucho café para sobrevivir el proceso.
